¿Música de cuerda y piano en un concierto de rap? Sí, Nach es muy grande

Gélida tarde en los alrededores de La Riviera. El frío otoño/invernal y tener el río Manzanares cerca no ayudaban a caldear el ámbiente, pero no importaba. Lo que iba a suceder dentro de la sala iba a subir la temperatura ambiental hasta límites insospechados.

Aún con la sorpresa de una sala a medio llenar, cosas del puente de la Constitución, pues el precio de las entradas sí animaba a ir, casi con puntualidad inglesa hacía acto de presencia Nach sobre el escenario.

Sin una nota musical sonando aún, sólo se oía la voz del público coreando «NA-CHO, NA-CHO, NA-CHO», lo que daba buena muestra de las ganas que tenía el público madrileño de ver al rapero alicantino.

El concierto empezaba con temas de su último disco Mejor que el silencio como por ejemplo Ni estabas ni estarás y Reino de lo absurdo.

Después sonaba Señor libro y señor calle y El mundo es mío.

Tras ello Tú hacía corear al público cada uno de los versos, para dar paso a un solo de Abram con una canción del que será su nuevo disco.

Después de eso dialogaban entre tema y tema Abram y Nach, éste le «escupía» Entonces quieres ser MC.

Abram se volvía a marcar un tema inédito en solitario para más tarde ser DJ Joaking quien se marcaba unos scratchs a los platos.

Escalera hacia el cielo y Requiem eran las canciones que se oirían después, todo ello mientras Nach comentaba como tenía la voz a medio gas tras su concierto del día anterior en Barcelona pero cómo el calor del público y las ganas le iban a hacer darlo todo, eso sí, siempre con la ayuda de todo el público recitando junto a él.

Los temas se iban sucediendo uno tras otro y cuando uno se quería dar cuenta ya llevabamos 1 hora de concierto y mucho aún por llegar.

Esclavos del destino y Pensando en voz alta eran interpretadas aunque no en su totalidad lo que hacía no poder escuchar uno de los mejores versos de dicha canción «Dicen que el talento es algo innato, puede que sea cierto. Pero riégalo a diario o habrá muerto. 50% suerte, 50% curro. No presumo. Aquí el curro es 99, la suerte es 1«.

Tras un buen discurso sobre el tamaño de los móviles actuales y comparándolos con los antiguos ghetto blaster, hizo que todos los allí presentes levantasen sus móviles encendidos para Disparos de silencio.

Mientras tanto, no duda en bajarse del escenario y mezclarse con el público mientras recita la canción, lo cual hace que los espectadores alucinasen y disfrutasen de la cercanía del cantante.

El camino del guerrero sonaría tras un parón en el que Nach comentaba que le encantaba juntarse con su público, que los años no pasaban en balde y que alguno le había dado un par de collejas, lo que hacía reir a todos los presentes.

Infama precedería a un solo de DJ Joakim pero esta vez con la voz. Primero rapeando, luego con tonos líricos y acabando con algo de beatbox.

El ambiente se caldeaba de nuevo con Un día en suburbia, una de sus canciones fetiche y que culminaría con todo el público cantando la canción de amor por excelencia del rapero, Amor libre.

Ser o no ser sería el preludio de una improvisación al piano de Moisés P. Sánchez ante una sala en total silencio para disfrutar de las notas de este gran maestro del jazz.

El silencio seguiría presente para poder disfrutar de como Nach recitaba en una gran intimidad Nada ni nadie, y posteriormente anunciar un nuevo tema de su futuro disco Los viajes inmóviles. Me llaman sonaba con el único acompañamiento de las notas de un violín y del piano. Todo el mundo espectante y con un silencio sepulcral.

Tras ello y aún con la ausencia de Ismael Serrano, quien era sustituido por la voz de todo el público, sonaba Ellas.

Y no había acabado ahí todo. Todavía quedaba mucho que ser recitado y «escupido» como el propio Nach decía, mientras pedía y preguntaba al público para que le ayudasen.

Mi alrededor canción con la que Abram daba un pequeño respiro a la garganta de Nach, aunque éste le ayudaba a los coros, era la anterior que sonaba a uno de los clásicos del rapero, Basado en hecho reales, la cual cumplía su 10º aniversario.

Manifiesto, otro de los grandes temas sonaba justo antes de que, aunque comenzase a sonar la base de Mi propio cielo, Nach rapease Palabras.

Y para ir cerrando el concierto, sonaba el tema que fue el single de Mejor que el silencio, El idioma de los dioses.

Tras ello, se vaciaba el escenario aunque para que apareciese DJ Joaking ataviado con una bata y un fonendoscopio para empezar a interpretar Efectos Vocales. Ese gran tema de Nach basando sus versos en 3 estrofas donde únicamente se utiliza una vocal diferente en cada uno de ellos.

Tras ello, el final del concierto se producía con Los elegidos.

Con el encendido de luces de la sala se daba por concluido un concierto tras más de 2 horas en los que todo el mundo había disfrutado y se había dejado la garganta con los temas Nach.

Quien aún considere a Nach un rapero más, es que no ha disfrutado de este genio en un concierto.

Cuando la música no es sólo aportada por unas bases digitalizadas pinchadas por un DJ sino que llevas contigo a un maestro al piano y a un grupo de cuerda con violines, violas, etc… es que no sólo eres muy bueno en lo que haces, sino que te preocupas por innovar y por convertir tu rap en algo más que unas rimas, en que tengan una cohesión musical de calidad y que proporcionen un formato global de gran valor.

¿Cuándo vuelves por Madrid? Ya te estamos esperando.

Fotos y crónica: Juan Carlos García